Era una fiesta donde predominaban los adultos más que chicos de su edad, aun así conocía a todos los presentes, pero él cumpleañero no gustaba de ningún tipo de fiesta, su cumpleaños podía ser la excepción solo porque era una vez al año.

Era claro que no llamaba la atención como lo hacía su hermano, no era tan sociable ni sonreía bonito tan fácilmente solo para dar buena impresión.

-Morimoto –distraído estaba observando a uno que otro presente sin darse cuenta que alguien estaba tan cerca de él, volteándose para encontrar a un chico de muy linda sonrisa, un poco más bajo que él, pero bien sabía de su verdadera edad.

-Hola -lo saludó acercándose recibiendo un abrazo de felicitaciones por su cumpleaños, para luego recibir una caja algo pesada. Pensando lo que podría ser le sonrió dándole las gracias a Yuri, el hermano menor de Kei.

-El tonto de mi hermano lo olvidó, estaba tan ansioso por venir que salió antes –lo vio cubrirse la boca suavemente con una de sus manos, de seguro imaginando el motivo de Kei.

-Estúpido Inoo –murmuró algo molesto pues también imaginó el motivo.

-¿Y Daiki? -preguntó el mayor pero más bajo, dando una inspección al lugar por si veía al novio de su hermano.

-Debe estar con el troglodita de tu hermano -y también miró alrededor por si los divisaba- pero qué... - el mayordomo al cual le había asignado la gran tarea estaba conversando con unas chicas que lo tenían rodeado. Miró y miró pero su hermano no estaba por ninguna parte- lo siento Inoo, debo ir a hacer unas cosas -se disculpó.

-Puedes llamarme por mi nombre –el mayor tomó su brazo antes de que se volteara con bastante insistencia en su mirada, sin dejar de sonreírle en ningún momento.

-Yuri -un ligero sonrojo en sus mejillas lo hizo desviar la mirada.

-Así está mejor -otra vez esa sonrisa que lo único que hizo fue ponerlo más nervioso enrojeciendo aun mas sus mejillas.

-Con permiso -y se fue en dirección al segundo piso pensando en las habitaciones.

-Mmm... ¿tratando de seducir donde no debes pequeño? -su apestosa presencia no lo sorprendió para nada.

-No hagas eso Kota -dijo molesto apartando la mano del mayor cuando revolvió su cabello.

-Te informo que ese chico ya tiene dueño y aunque te esfuerces mucho en seducirlo no lograrás nada –la copa que estaba en una de sus manos fue vaciada bebiendo el liquido dulce- y que ya está marcado -el más bajo lo miró sin creerle ninguna palabra.

-Como te gustaría que fuese cierto -se bufó dando media vuelta para salir al patio, donde casi la mitad de los invitados se encontraba.

***

Los besos no cesaban y con cada caricia en cada una de las dos porciones carnosas y redondeadas que constituyen el trasero del menor lo llenaban de morbo pensando en ya sentir sus cálidas paredes presionar su miembro, pero tales caricias al menor lo hacía moverse de manera descarada sobre la entrepierna de su novio, arrancándole uno que otro jadeo por la fricción de sus miembros. Kei quitó rápidamente y con algo de dificultad la camisa de Daiki, arrancando los últimos tres botones al darle problemas. Daiki soltó una risita que fue obligada a silenciar cuando el mayor le indicó que guardara silencio.

Con un puchero se alejó de su novio y se terminó de quitar la camisa para seguir con la de Kei, importándole nada abrirla de manera agresiva sin dejar tan solo un botón en ella, sonriendo acarició su torso tocando mas sus pectorales, descendiendo por su estomago y llegar al borde de esos ajustados pantalones a su cadera.

-Uhm –para su tortura Daiki comenzó a frotar su entrepierna por sobre la ropa, mirándolo con esa sonrisa que pocas veces hacía. Para cuando liberó su miembro de entre el pantalón y ropa interior lo introdujo a su boca succionando de el como si quisiera que pronto se corriera en su boca– ohh… no Daiki, ven acá –tomó de su barbilla para que dejase su miembro y se acercara para besarlo de la misma forma fogosa que solían hacerlo. Introduciendo su lengua en su boca mientras desabrochaba el pantalón del menor para bajárselo con torpeza mientras este también le bajaba un poco el suyo. Se separaron para que Daiki terminara de quitarse el pantalón con el bóxer poniéndose luego sobre su entrepierna.

Tomó el miembro del mayor rozándolo en su entrada, sintiendo la presión que hacía este cuando bajaba un poco, y sintiendo lo estresante que era para Kei el que hiciera eso, viéndolo mover el labio sin poder evitar mordérselos.

-Aaahh –gimió cuando Kei rozó la entrada con uno de sus dedos, separando un poco sus glúteos. Daiki no dejaba de masajear el miembro del mayor hasta que pensó que ya era suficiente, quitó esa mano que amenazaba con introducir uno de sus dedos en él para hacer presión en su entrada con el miembro de Kei y lo introdujo poco a poco, quejándose el sentir como sus paredes se abrían.

Kei se recostó completamente sobre el piso frío disfrutando del menor que aun no se movía hasta que decidió levantar su cadera, escuchándolo gemir, cargando las manos sobre su pecho, llegando más abajo antes de volver a subir.

No dejaba de moverse de arriba hacia abajo, bajando con más intensidad que otras, para que así Kei lo penetrara hasta el fondo soltando sin poder evitar un fuerte gemido que Inoo temió que lo escuchasen. Si no fuera por la poca conciencia que le quedaba se hubiese venido en ese momento. Improvistamente Daiki se hizo hacia adelante dejando que el miembro del mayor saliera de su cuerpo, Kei estaba dispuesto a protestar cuando el menor se acomodó entre sus piernas.

-Es mi turno –dijo con lasciva levantando una de las piernas de Kei para dejarla sobre su hombro. El mayor no protestó pues pretendía dejar que lo poseyera por una vez. Pero lo que no pensó fue en que Daiki no tomaría las precauciones debidas antes de.

Se introdujo lentamente, sintiendo inmediatamente como la punta de su miembro era aprisionada y como Kei lo miraba con una mueca de dolor. Apretó fuertemente su brazo sin intención de querer hacerlo, pero la punzada en su interior lo hacía reaccionar sin darse cuenta.

-Ve... más despacio -le pidió cuando sentía que Daiki se adentraba cada vez más en él.

-No... no puedo -la estreches que sentía era tan placentera que se le era imposible querer detenerse, era la primera vez que sentía algo así y comenzaba a perder la cordura.

-De—demonios Daiki... detente -con sus manos en los hombros del menor y ojos cerrados hizo el intento de alejarlo.

-¿Esto... esto es lo que sientes cu—cuando entras en mi? –preguntó después de llegar un poco más en su interior, agitando mas su respiración, la cual chocaba con la perlada piel del pecho de Kei, su frente cargada en él y también con los ojos cerrados.

-Lo único…. Lo único que siento es dolor –se quejó, Daiki sonrió pues a él también le dolió la primera vez y aun le dolía cuando Kei le daban ataques de sadismo por las ganas de tener sexo.

-Pero cambiará –y acercando una mano al miembro descubierto del mayor lo tomó entre sus dedos y comenzó a frotarlo.

Daiki tenía algo de razón, solo algo, porque aun no dejaba de doler su pasaje que aunque no se moviera sentía que lo partía. Se incorporó un poco sin dejar de masturbar a su novio y acomodándose bien entre sus piernas alzó la mirada hacia ese rostro que expresaba algo de dolor y lo miraba con ojos entre cerrados. Cargó su peso en su codo al lado del cuerpo bajo él, de manera que no apoyaba todo su peso para no aplastarlo, sabiendo que podría pasar porque el mismo pasó por eso, cubrió la boca de Kei con su mano e hizo el primer movimiento de afuera hacia adentro, callando el grito que Inoo no pudo evitar.

Estimulaba su miento al compás de sus caderas con cortas embestidas. Si ese grandioso placer era el que a Kei no lo hacía detenerse cuando lo poseía, lo quería volver a sentir en futuros días. Sentía una exquisita fricción. Su interior tan caliente y mojado con su semen que le facilitaba cada embestida. Para Kei comenzaba a ser algo desgarradoramente placentero, la estimulación en su miembro ayudaba bastante.

-¡Aah! –la mano que antes estaba en el hombro del menor paró en la boca de este, el movimiento de Kei al levantar su cadera y embestir contra el mismo Daiki lo hizo gemir.

Al carajo, no podía aguantar más, quitó la mano de Kei de su boca y su propia de la de él, acercándose para besarlo con dificultad por la agitación y el escaso aire que entraba a sus pulmones.

***

-Me rindo –dijo en un suspiro volviendo al salón. No encontraba a su hermano por ninguna parte. Se acercó a una de las mesas para beber algo.

-Mas… muévete mas ra—rápido –y el liquido casi lo escupe después de escuchar aquello, haciéndolo toser reiteradas veces.

-Aaaahhh… uuhmm… Kei .. voy, voy a correrme –y la situación la vio tan complicada. El par estaba teniendo sexo en el mismo salón debajo de una mesa, mesa a la que cualquiera podía acercarse y conociendo lo escandaloso que solía ser Daiki se vio en una situación complicada. Había demasiada gente dentro y la música que interpretaba el pequeño grupo de orquesta era suave.

Casi corriendo se acercó al grupo pidiendo alguna composición fuerte y pidiéndole a todos los invitados cerca de la mesa que saliese al jardín porque deseaba dar un pequeño discurso. Ya casi podía oír a su hermano gritar. Después de darle una última mirada a aquella mesa se retiró pues le tocaba dar el supuesto discurso. Se la pagarían y muy caro. Mas no supo pues comenzó a hablar.

***

-¿Pasó algo? –llegó Yuri con un semblante de niño bueno y preocupado– te ves algo… preocupado –Ryutaro se sorprendió pensando en cómo podía dejar que hasta en el rostro se plasmara la preocupación que sentía de si la pareja había sido descubierta– si es por Daiki y mi hermano no te preocupes, de seguro deben andar por ahí haciendo lo que mejor saben hacer –inmediatamente lo miró y Yuri volvió a leer las expresiones de su rostro– ¿que si sé lo qué hacen? Claro, en casa, cada que Daiki va debo ponerme a escuchar música para no escuchar lo escandalosos que son, es una suerte que nuestros padres trabajen y nadie diga nada de lo que sucede, aunque no se me haría extraño que en cualquier momento los descubran, Kei es muy torpe y disculpa pero, tu hermano no se queda atrás. Me pregunto si uno de ellos le pegó la torpeza al otro o ya eran así –Ryutaro comenzó a reír y es que el mismo se preguntaba eso– ¿tú qué piensas? –preguntó mientras aceptaba una copa del mayordomo y tomando otra para el menor que con gusto la aceptó.

-Yo cre…

-Yo creo que la torpeza se les hizo más evidente con tanto sexo -ambos voltearon, uno impaciente por encontrar sus ojos con los del recién llegado y el otro con molestia.

-La pregunta no te la hice a ti –pero poca atención recibió del mayor.

-Claro, la pregunta iba dirigida hacia mí. ¿Sabías que meterse en conversaciones ajenas es de mala educación? –desvió la vista para mirar fijamente el liquido de su copa simulando estar molesto. Yuri sin poder evitarlo se sintió triunfante por la situación.

-Uhm, tienes razón pero no puedo dejar a la oveja blanca junto al lobo disfrazado de oveja.

-De qué tonterías hablas –frunció el ceño antes de acercar el cristal a sus labios, que improvistamente le fue arrebatado, vaciándose en la boca del más alto de los tres.

-¡Ey! ¡No era para ti –le reprochó Yuri queriendo acercarse para empujarlo de la cercanía de Ryutaro– vete de aquí –dijo con molestia, haciendo un mal cálculo de todo y dejando que el liquido rojizo de su copa se derramara en la negra camisa del cumpleañero al chocar con su cuerpo.

-Oh no –musitó el menor al sentir la humedad contra su piel al pegarse la camisa.

-Ry—Ryutaro lo siento –se disculpó sin siquiera saber qué hacer.

-Está bien, iré a cambiarme, ya regreso -y tras las continuas disculpas de Yuri, se perdió dentro de la casa.

-Sabía que eras torpe pero no a tal grado.

-Cállate idiota, todo esto pasó por tu culpa –se sentía avergonzado.

-Mocoso no es bueno echarle la culpa a los demás –y revolviendo su sedoso cabello se marchó de su lado burlándose de él con una sonrisa.


Mientras Yuri seguía reprochándose por su error Ryutaro ya estaba en su habitación quitándose la camisa mojada ingresando al baño y limpiar su pecho con agua.

-Demonios – se estremeció, el agua estaba helada.

Secó su pecho mientras miraba su reflejo en el espejo, odiaba esas facciones infantiles. Delineaba el contorno de sus ojos con sus dedos, eran grandes y reflejaban demasiada niñez, descendió por su nariz hasta llegar a sus labios. Sonrió forzosamente mostrando sus dientes.

Su entrecejo se frunció y dejó el espejo para ir a su ropero y sacar una de sus camisas.

-Estúpido día –murmuró malhumorado, su hermano teniendo sexo con Kei bajo una mesa en público y no era que odiara que tuviese intimidades… está bien, si le molestaba pero solo porque aun no podía aceptar a Kei como novio de su hermano, le encontraba tantas cosas malas que sentía que malograba a su hermano cada vez más, sabía que era tonto, pero algo de Kei lo era el doble y lo que más odiaba de él era el hecho de que no le importaba el lugar donde se lo montaba con Daiki y pensar que su padre cualquier día podría enterarse o peor, que el mismo los viese le preocupaba.

Se sentía tonto preocupándose por su hermano cuando ni el mismo cuidaba de sí mismo.

-¿En qué piensas? –esa voz y el aire tibio tan cerca de la piel de su cuello rozando su oído lo hicieron estremecer y sobresaltarse. Junto con ello acelerando su corazón como muchas veces antes.

-¿Qué haces aquí? –fingió importarle poco su presencia, volviendo a tomar la camisa que antes dejó sobre la cama por dejarse llevar con los pensamientos– dije que regresaría, no era necesario que vinieses por mi -y por unos segundos quiso dejarse llevar por esas manos que se deslizaban por sus brazos– no hagas eso –tomó una de esas manos que posadas se habían quedado en su vientre.

-¿Por qué? Sé que te gusta –otra vez ese aire cerca de su piel y un inevitable sonrojo en sus mejillas.

-Yabu no comiences –soltándose de su abrazo se alejó acercándose a la ventana de su habitación mientras metía los brazo en cada manga– dejaste solo a Yuri –dijo al ver al nombrado solo, seguramente esperándolo. Sin darse cuenta de cómo el mayor se molestó frunciendo el seño y sintiendo molestos celos carcomerle el alma, y todo por una palabra y cuando estaba a punto de reprocharle Ryutaro lo interrumpió- ¿Cuando subías viste a Daiki?

-Si, salió corriendo con Kei en dirección contraria, seguramente iban a su habitación, ¿por qué? –preguntó sabiendo el por qué de su pregunta.

-Por nada –desabrochó el botón de su pantalón para meter la camisa dentro, pero nada pudo hacer cuando se vio acorralado entre la ventana y el cuerpo del más alto– ¡¿Qué haces?! –trató de alejarse de la ventana apoyando ambas manos en el vidrio y tirándose hacia atrás, pero la fuerza de Yabu se lo impedía– no quiero hacerlo, es mi cumpleaños y además –hizo una pausa al sentir algo húmedo recorrer su cuello– estamos en la ventana –por muchos los intentos de zafarse de aquel encierro nada lograba, estaba nervioso, aunque la luz estuviese apagada igual se podía ver desde abajo lo que estaba cerca del ventanal.

-¿Quieres saber qué siente Daiki en situaciones como esta? –preguntó Yabu una vez más cerca de su oído.

-No gracias. Ahora déjame, debo estar con los invitados. No quiero hacerlo ni estoy en la obligación de complacerte, no tenemos nada, ¿lo olvidas? Así que ahora aléjate - y aunque dijera esas palabras, por nada del mundo quería que lo soltara y por otro lado le dolía, le dolía decirle la verdad y tener él mismo tan claro que no tuviesen nada concreto, eso le dolía. Muy bien Yabu podía estar con otra persona, incluso dudaba de que ya no lo estuviese.

-Si quieres terminar así entonces no puedo hacer nada –su respiración se detuvo y deseó golpearlo por alejarse. Suspiró exageradamente. Acomodó bien su camisa y se volteó sin mirarlo.

-Te espero abajo –ni siquiera alcanzó a dar un paso cuando Yabu volvió a acorralarlo contra la ventana – ¿qué demonios haces? –malhumorado lo miró a los ojos.

-Te conozco, sé muy bien lo que sientes y lo que quieres, ¿acaso ese suspiro no fue algo evidente?, aunque no lo digas sé que anhelas estar conmigo y envidias tanto a tu hermano por tener a Kei que siempre está con él, importándole poco el lugar -sonrió al ver el entrecejo fruncido de Ryutaro.

-No digas estupideces, no tengo nada que envidiar de esa estúpida pareja, además si quisiera estar con alguien ya lo estaría –aunque se mostraba serio en cada palabra que pronunciaba se sentía tan idiota al darle explicaciones.

-Bien –suspiró– fin de la conversación –ni siquiera alcanzó a tomar algo de aire cuando ya lo estaba besando abrazando su delgada cintura para no alejarlo, con ambas manos en los hombros de Yabu trató de alejarlo y al no lograr nada lo mordió– ¡Uhm! Creo, que hoy no seré tan dulce –volvió a besarlo tomando sus delgadas muñecas y sujetándolas con una de sus manos sobre su cabeza. Volviendo la otra mano a su cintura para comenzar a sacarle la camisa del pantalón.

Los movimientos que implicaban hacer para alejarse de su cuerpo estaban siendo procaces, sobre todo cuando Kota le bajó su pantalón junto con la ropa interior acariciando sus piernas ascendente y descendentemente al terminar y antes de quitarse su propio pantalón, todo sin siquiera dejar de besarlo pero otorgándole uno que otro segundo para que tomara aire, aire que se le era arrebatado nuevamente en otra unión de sus labios.
Dejó libre sus manos pero solo para quitarle la camisa y la propia junto con lo que quedaba de ropa. Ryutaro pensó que tan solo por eso tendría una oportunidad de huir de ahí, estaba demás decir que si terminarían haciéndolo pero no quería que fuese en la ventana. Las cosas quizás se le harían más fáciles si no se le hubiese ocurrido irse al lado de la ventana, inevitablemente quedando otra vez contra el cristal, ahora siendo preso por el cuerpo del mayor que volvió a sujetar sus muñecas, y l también sus delgadas piernas que quedaron abiertas por la posición.

Nunca se había dado cuenta de cuánta fuerza podía tener Kota al sostener con una mano ambas de sus muñecas mientras la otra la usaba para masturbarlo con fuerza cada que llegaba a la base de su miembro, con algo de miedo a correrse tan solo con lo que le hacía. Se sintió aun mas preso entre el vidrio ya empeñado por su calor corporal y el cálido pecho de Kota que poco afectado se veía por la situación pues su semblante era serio y tranquilo. Por su mente no pasaba lo mucho que Kota estaba excitado con solo mirarlo.

-¿Se siente bien si toco aquí? –preguntó escabullendo la mano que antes ocupaba para masturbarlo a su trasero, dejando que las yemas de los dedos rozaran su pasaje.

-¡No juegues conmigo! –alterado por la situación. Toda su espalda desnuda al público y su trasero siendo manoseado como si nada. 

Miedo, estaba sintiendo miedo.

Hace mucho tiempo no veía a Ryutaro en ese estado, desde que decidió ser dulce con él no se permitió semi-abusar de su cuerpo, pero ahora podía volver a sentir esa excitación que le causaba el someterlo a sus caprichos. Se acercó a sus labios solo para rozarlos con los suyos antes de introducir el primer dedo. Escuchando en seguida como Ryutaro se negaba a jadear mordiéndose el labio, pero su respiración que se pausó en ese momento le hicieron saber que no estaba tan mal y que no sentía ni el más mínimo dolor aunque su entrecejo estuviese fruncido.

-Y-Yabu detente –su voz podía decirle muchas cosas pero su rostro era otra cosa. Esas mejillas sonrojadas y ojos que no se atrevían a mirarlo eran una gran evidencia de que mentía.

-Ni en sueños –dijo antes de comenzar a mover aquel dedo en su interior sintiéndolo moverse hacia adelante y su miembro hiciera fracción con su piel– ya me gustaría estar aquí dentro –introduciendo el segundo dedo tomó sus labios besándolo solo por querer arrebatarle el aire y se agitara aun más.

Ryutaro jadeaba entre besos, tratando de pedirle una vez más que se detuviera. Por muchas cosas que sintiera no podía dejar de pensar que aun estaba contra el vidrio.

-Aaahh-aaah… - trató de respirar como era debido después del beso y que Yabu quitara los dedos de su interior, quedándole poca fuerza y queriendo dejar los pies sobre el piso. Lo difícil era hacer lo que quisiese si estaba preso de esa manera, que aunque no quisiera que Yabu no lo penetrara nada podía hacer al estar con las piernas abiertas.

El mayor no fue para nada delicado al introducirse de una embestida, casi eyaculando al aun sentirlo demasiado estrecho. Ryutaro aguantándose aun de gemir fuertemente aunque esa penetración lo obligó a morderse demasiado el labio.

-Que sucio eres, dices no querer hacerlo pero me aprietas tanto que con solo escucharte gemir ahora podría correrme –dijo lamiendo el labio inferior del menor.

-No… no digas eso –hace mucho Yabu no decía esas cosas cuando lo hacían– ¡Yabu no! -el mayor comenzó a moverse soltando sus manos para pasar las propias por debajo de las piernas de Ryutaro y tomarlo de los glúteos comenzando el vaivén para nada lento.

Ryutaro trataba de sostenerse de lo que pudieran tomar sus manos, dejando una que otra marca roja en los hombros y espalda de Yabu. Era tanto lo perlado que estaban sus cuerpos que cada que chocaba con la piel del menor se escuchaba un sonido húmedo, acompañado de los gemidos que ahora Ryutaro no podía dejar de emitir.

Manoseaba aun mas sus glúteos en cada movimiento de caderas, así le era más cómodo aunque parecía que al menor le dificultaba mas el respirar. Sus gemidos ya no reprimidos le eran tan estimulantes que escucharlo decir palabras sucias, pero aun así quería escucharlas. La respiración tan cerca de su oído y el pasaje suave que apretaba tanto su miembro lo llevarían a un peligroso orgasmo y por la forma en que los gemidos del menor aumentaban de tono estaba seguro que no duraría mucho. Pero antes de que todo aquello terminara en un delicioso orgasmo tenía que escuchar lo que los labios del menor le negaron tantas veces.

-Lo dirás, ¿verdad? –Ryutaro entendía a lo que se refería pero no lo iba a hacer.

-No, n-no lo haré –estaba a punto de correrse, sentía la humedad en su miembro y cuando pensó que al fin se correría contrayendo su pasaje, un fuerte agarre en su miembro lo descolocó mirando su entrepierna. Kota apretaba su base impidiéndole terminar.

-Yabu… deja, deja correrme –pidió mirándolo con los ojos entrecerrados por cada embestida.

-No, no hasta que lo digas y te llene de mi –y todo porque quería descansar de tal tortura que era el no poder terminar de una vez lo llevaron a decir lo que muchas veces antes se negó por lo vergonzoso que era pronunciar esas palabras.

-K-Kota más, más fuerte, me encanta como me la metes—A-AH! KOTA! –y con ese grito se corrió al fin, contrayéndose su pasaje, llevando igualmente al mayor al orgasmo, sin importarle el correrse dentro de él. Lo sentía estremecerse, aun no dejaba de masturbarlo hasta que la última gota de esencia saliese del menor.

Ambos con las respiraciones agitadas y cansados, Kota encontró mejor idea irse sobre la cama que dejarse caer y terminar juntos en el piso. Aun en sus brazos sin salir de él se lo llevó a la cama para tirarse juntos en ella. Pero cuando pretendía salir de su interior la puerta de la habitación se abrió con un estruendoso ruido cuando esta dio contra la pared.

-¡RYUTARO! –el rostro de Daiki estaba que se caía de la impresión al ver a su hermano desnudo sobre la cama con un Yabu también desnudo sobre el acariciando una de las flexionadas pierdas de Ryutaro– ¡ KOTA! –el mayor lo miró pero sin ningún tipo de expresión en particular, solo la que normalmente usaba para cosas sin importancia.

-Oh, Kota. –Kei salió por detrás de Daiki y al mirar la pareja desnuda sobre la cama sonrió– OOH~ Ryutaro no estás nada de mal –dijo con lasciva mirada recibiendo un fuerte y muy fuerte golpe en el estomago de parte de su novio, casi de la misma magnitud que el golpe que Ryutaro le dio una vez– ¿por qué? –preguntó encogiéndose, y la mirada que recibió fue tan escalofriante que prefirió callar.

-Daiki sal de mi habitación –le dijo su pequeño hermano tratando de cubrir su cuerpo pero no había nada con que hacerlo.

-Kota –apuntó al mayor que ni se inmutaba, seguía en la misma posición– ¡quítate de encima!

-Uhm. ¿Y por qué tendría que hacer eso? –volvió a acariciar la pierna de Ryutaro hasta dejar su mano debajo de su espalda baja y levantarlo para unirse aun mas- no me digas que estás celoso –se burló, Daiki pretendía ir a golpearlo pero el mismo Kei aún adolorido lo detuvo.

-Suéltame Kei, iré a sacar a ese idiota que se quiere violar a mi hermano –trataba de soltarse de su novio.

-Pero que dices –Ryutaro miró a Kota– ya me lo he comido cientos de veces, incluso llegaste tarde. Ahora si nos permites me gustaría continuar– y movió su cadera sin soltar aun el cuerpo del menor que por el roce soltó un quejido cubriéndose la boca.

-¡Pero qué te pasa! ¡Daiki nos está mirando! ¡Detente! –golpeaba los hombros del mayor que no dejaba de sonreír.

-¡¡¡AAAAAAAH!!! ¡IDIOTA! ¡¡TE MATO!! –a Kei no le dio de otra que tomando por detrás de la cintura y comenzar a tironear de él, sujetándose de la puerta para tener más fuerza – ¡INOO SUÉLTAME! –aun después de que se cerrara la puerta se podían escuchar los gritos del mayor de los Morimoto.

-Demonios –suspiró Kota, saliendo de su interior.

Ryutaro solo lo miraba mientras su cuerpo era soltado para verlo recostarse a su lado. Sus piernas temblaron y sintió como la esencia del mayor se escurría entre ellas mientras se hincaba sobre la cama. Su cuerpo aun daba pequeños temblores y casi no podía sostenerse por él mismo.

-Hubiese preferido que Daiki no se enterara –Ryutaro pensaba exactamente lo mismo– ahora me hará la vida imposible –suspiró pensando en lo que se le venía encima teniendo a un cuñado celoso. Ryutaro comenzó a reír– Ryutaro –el menor lo miró acomodarse, apoyándose sobre sus propios brazos– ven acá –le sonrió atraiéndolo a su cuerpo, depositándolo sobre el suyo. Amaba lo sumiso que podía ser el menor en algunas ocasiones como esta. Acarició su espalda de forma tierna y besó su frente– no me engañes, ¿si?

-De qué demonios hablas –dijo arqueando una ceja.

-Eres mío. Completamente mío –aunque Ryutaro no entendía a qué iba todo eso sintió ese reconfortable calorcito en su pecho, quedándose en silencio mientras descansaba sobre el pecho de Kota escuchando el palpitar rápido de su corazón.


Fin…

----
wn! no pude evitar dejar esa hermosa frase XD la que está marcado en negrita. Créditos de WordReference jajaja
Perdón por ese final X'D pero tengo que irme y la mymi quiere lemon para su Fundacion "Necesito lemon para vivir"
Se les quiere. Saludos y dejen lindos comentarios.

17 comentarios:

Satommy dijo...

Asasdsad seré primera mientras termino de leer 8D

Satommy dijo...

Ya~ Ya termine de leer 8D
La fundacion "Necesito lemon para vivir" agradece
tu colaboracion XD Ya sabes~ Hay gente que sin
tus fics, moriria [?] *yo soy una*
Aasdasd Se lo tiro en la ventana wn! LOL~
Tenia que decirlo de esa manera, hubieras visto como
se abrio mi boca al leer como lo hacian Yabu y Ryutaro...
Inoodai esta enfermo -w-Uu Mira que debajo de una mesa!
Jajajaja pero bueno, hay lugares y lugares 8D
Chii se quiere violar a Ryutaro LOL~ Que gilero el chico...
Asasdads gracias Deni :3 En serio, gracias~

Soany dijo...

kyaaaaaaaaaaaaaaaaaaa *desangra* *explota*
pero que lemon mas fantasticoo !!!!! mi mente volaba!!

primero daiki asdasd el tambien es bueno de seme jejejeje
si no preuntenle a inoo!! me encanata cuando es seme!!! *¬*

luego yabu que iso que explora *¬¬* es que como se lo iso a ryuuu fueeee el paraiso jejeje y el disque no!!!

bien que lo queriaa!!

y cuando los descubre daiki kyaaaaaaaaaaaaa y encima no se aparta y es mas le sigueeeeeeeee *muere*

y dice "ya me lo he comifo cientos de veces" osea full kyaaaaaaaaaaaaaa ~~

muy buen fics lo ameeee^^
aww pero ya se final T^T estaria bueno una conti u.u

pero bueno estupendo tu fcis!! n.n

AmiS dijo...

O_O!!!
waaaaa!!! lo terminaste...!!!
me encantooooo!!...mira quien reclama ahora!!!

Unknown dijo...

OMFG *_________________* -perdida en el infinito-
Tu, si tu o_ó ashfdsaghdasdashdfsa ME QUIERES MATAR XD!
goshhh, gosh GOSHH ENFERMOS DEL MAL *¬*
abajo de la mesa & en la ventana XD!
asdas que sería de una invitada que está afuera
viendo al cielo y derrepente se topa con la ventana
y ve... HAHA TODO XD! asdsada mutaría :E
ohhhh gooshhh, tan sexy, necesitaba esto XD!!!
iba a decir más pero se me quedó la mente en blancoXD!

tsuki dijo...

ooooooooooooooo........................ tu eres la maestra de todas con esot de los fics
mira ke poner semejantes situaciones
nunca habia leido ke daiki poseyera a alguien
o no recuerdo
Yabu ya se habia comido otras veces a ryu
y
yo ke lo creia un santo :p

Ann-chan dijo...

wo~ por fin el final XD esta re bueno *-*

dalia801 dijo...

kyaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
O¬O hemorragia total
opino lo mismo q Satommy XD
Daiki ya era hora de darsela de hermano mayor >///<

Midori dijo...

*O* tus limones me canlientan y no hay quien me enfrie X'D
yuuki~! exacto! necesitamos lemon para vivir 1313
y como no quieres que mucha gente muera nos seguiras deleitando con los tuyos x)(?)
ya, como sea~ lo ame!! ese daiki mostro que si sirve para seme xD
los amo a esos 2 que hasta abajo de la mesa X'DD
y los otros en la ventana O-O
lo amee! arigatou yuuki :D

Anónimo dijo...

YUUUUUUKII!!!!!!!!!!!!!

tengo que citar esto... "cada una de las dos porciones carnosas y redondeadas que constituyen el trasero" oooooooooooooh es que explote cuando lei eso xDDDDDDDDDDD fue taan askdjaskdjaslkdjal me descompuso entera xDDDDDD y el lemmon de las dos parejas fue taaanas djkkljdsl -mutando al 100%- klsajdlaskjda noooooooooo lo ame lo ame! *O*~ espere muchos dias por la 3ra parte y te juero que mori muy en mala! *O*♥
( vuelvo a lo mismo... ESA FRASE ME MATO! xDDDD) gracias Yuuki por estos fics que alimentan mi pervercion (?) *OOO*~!!!♥♥♥

Yuuki dijo...

JAJAJAJAJA que risa X'DD Nao de verdad me hizo reir tu comentario y que bueno que te haya gustando la tercera parte del fic aunque a mi aun no me satisface del todo. De veras me hizo feliz tu comentario XD

Anónimo dijo...

ahahahaha y a mi la tercera parteQQ! cada vez que entro a tu blog... no puedo evitar ir a la parte en negrita de este fic... xDDDDDDDDD ayer lo recordé todo el dia y me reia como idiota, sola, y todos me miraban raro, pero yo era feliz xD

Anónimo dijo...

me encanto estas frases:- Suéltame Kei, iré a sacar a ese idiota que se quiere violar a mi hermano
- Pero que dices– ya me lo he comido cientos de veces, incluso llegaste tarde. Estuvo muy muy bueno.

MinaY dijo...

asdasdfsd ala~~~~~~~~~~~~~+ *o*
-muere muerta en vida-
esta ipermegagenial+osea
se supone q deberia estar llendome ala escuela y tenme aki leyendo con la boca abierta
asda amo el inooodai y me matast con esto osea bajo la mesa~~~~ y dai de seme *0000*
waaaaa!! y al ryutaro con yabu ASDFGHJHGFDSASDFGHJG wtf mori~~~
y asdfg Dai paq veas q es lo q sient el ryutaro cuando estas con keii 1313
xDD
wzaaaaa!! es genial
amo tus fics encerio >.<

Anónimo dijo...

demasiada accion estoy ...en mi nube y solo pienso lemon....lemon...lemon...colapso......... jajajaj gracias gran fic....katyna

Anónimo dijo...

OMG!!!! que puedo decrite simplemente delicioso dasdadsf%&$&Sdsd bababa+~~~ estaba mi boca abirta hasta el final y una q otra carcajada por las bakadas de las 2 parejas XDD pero en verdad ame
el lemon sdfdgdf$%$#$%%#$%sdsdfs *muero* >////< jaja en verdad que excelente fic yabutaro y inoodai mis parejas favoritas ♥w♥

arigato!! yuuki espero mas lemons ya que como dices no podemos vivir sin ellos XDDD jaja

Shute-Chan dijo...

OMG!!!!
fue un final taaan~ afasgashsha~
y esas palabras en negrita me mataron~ :3
y para acabarla~ Daiki hizo lo mismo que su hermano le hacia xD LOL
me ah encantado, mis dos parejas favoritas (aunque tambien me gusta el ChiTaro)

ah! espero que si leas esto!, termina con los seriales que tienes,
ya no me la paso por aqui por eso... TT__________TT como no estan terminados, cuando los leo y llego al capitulo final pero dice 'continuara' me quedo llorando y tirando todo a mi alcance... NO ME HAGAS SUFRIR!!!

Publicar un comentario

¿Qué piensas sobre lo que escribí? D:
Comenta, me gusta saber lo que piensas. ♥~

Copyright © 2011 YuukiNii's Fics ♥. Designed by MakeQuick, blogger theme by Blog and Web | Posts RSS | Comments RSS